``No estamos aquí porque seamos libres, si estamos aquí es porque no lo somos´´

MATRIX

viernes, 25 de mayo de 2012


La información sobre sectas

(Fuente: Rodríguez, P. (2000). Adicción a sectas. Barcelona: Ediciones B., capítulo 32, pp. 276-287)

La utilidad de la información sobre una «secta» puede ser mucha o poca en función del objetivo perseguido en cada momento. En principio, será adecuada para poder valorar globalmente la situación, posibilidades y riesgos que puede correr un sectario, puesto que no todos los grupos tienen igual incidencia sobre la dinámica psicosocial, ni la misma voracidad sobre los bienes de sus adeptos, etc. Pero, dado que, tal como ya hemos mostrado, los conflictos sectarios, que van desde la mera afiliación a la sectadependencia, no tienen su causa básica en el perfil de la «secta» sino en el perfil psicosocial previo del adepto, para plantearse un abordaje terapéutico será infinitamente más necesaria la información sobre la personalidad y entorno social del sectario que no la referida a la «secta» en sí misma; y lo mismo reza para las actuaciones directas, que deberán concentrarse más en apoyar al sujeto que en presionar contra el grupo. De todos modos, siempre será mejor tener el máximo de datos posibles sobre la «secta» de referencia ya que ello puede ayudar a diseñar algunas estrategias con mejor base. 
La información, por tanto, podrá ser un instrumento importante en el abordaje de la problemática sectaria, pero no cualquier información será adecuada para servir a nuestros propósitos. Resulta imprescindible que los datos que se vayan a emplear sean ciertos y objetivos, y que conformen un conjunto bien documentado, contrastado y veraz. 
Informar con veracidad es un deber, pero no sólo por ética —que ya es razón más que suficiente—, sino por pura estrategia. Un sectadependiente, por poderosa que sea su adicción a un grupo, está en condiciones de saber distinguir entre lo que puede ser posible o no respecto de su «secta», pero, sobretodo, es perfectamente capaz de poder diferenciar una información bien documentada de una vulgar patraña. Otra cosa bien distinta será que esa persona pueda detectar las mentiras y contradicciones que rodean su propia vida dentro y fuera de la secta, ya que la dinámica manipuladora grupal y el proceso adictivo en que está atrapada le impiden verlas como tales o, en caso de ser consciente de ellas, le fuerzan a asumirlas como buenas y deseables dentro del marco de coherencia que necesita mantener a fin de que su particular reductor de ansiedad siga siendo eficaz.
Debe tenerse siempre muy presente que un sectario, tal como ya vimos, basa su identidad —en un alto grado o totalmente— en el hecho de la pertenencia a su grupo y ello, ventajas de supervivencia emocional al margen, le lleva a cerrarse absolutamente —e incluso a reaccionar con ira o violencia— ante cualquier dato que afecte negativamente a su colectivo y, en consecuencia, a su mismísimo núcleo de personalidad. Además, sabemos también que parte del proceso manipulador sectario consiste en controlar los mecanismos para la adquisición de información, forzando que un sujeto sólo admita los imputs procedentes de la secta —y/o aquellos externos relacionados con pautas de supervivencia cotidiana que, claro está, no contradigan los dogmas sectarios— y rechace todos los ajenos y/o que cuestionen la imagen del grupo y/o su permanencia en él. 
Cualquier dinámica de sectarismo destructivo programa las claves generales de interpretación de las percepciones a la luz de su doctrina —ver los clichés en el apartado 15—, de modo que, en el aspecto concreto que tratamos, sus adeptos sólo puedan ver como «mentiras» o «difamaciones» todas las informaciones contrarias a su grupo y líder. Para que la manipulación sectaria sea coherente —no olvidemos que incluso el más cretino de los humanos sabe que nadie ataca a otro sin motivo—, la miopía de la grey se acuna sobre un armazón conspiranoicoque lleva a considerar las críticas como ataques organizados y tramados desde «oscuros intereses» —de políticos, ateos, católicos, judíos, comunistas, fascistas, periodistas, psiquiatras,... es decir, de cualquier colectivo que el líder sectario y sus intereses señalen como «el enemigo»— a fin de acabar con el grupo y su misión —que representan en ese momento la única vía de supervivencia emocional de sus adeptos— y dañar de forma alevosa y dolosa a cada uno de sus miembros (personalizando así el peligro para provocar más visceralidad en la respuesta de rechazo del sujeto).
Por otra parte, las informaciones críticas publicadas que afecten de forma directa y notable a una «secta», suelen ser comentadas en grupo por los responsables locales—habitualmente en medio de alguna sesión ritual o de formación— y reinterpretadas hasta demostrar su «falsedad»; aunque, lógicamente, los líderes sectarios sólo se toman la molestia en hacer tal cosa cuando lo publicado es cierto y tiene suficiente entidad como para poder generar dudas y conflictos entre los miembros. Los estrategias empleadas para este menester se fundamentan, básicamente, en el poder y credibilidad que emana cualquier figura investida de liderazgo, en el estado de sumisión y dependencia que embarga a la mayoría de los adeptos, en su necesidad de seguir creyendo que están en «el buen lugar», y en la desconexión de éstos respecto a buena parte de la dinámica social general. 
Entre las muchas estratagemas que utiliza el sectarismo destructivo para invalidar los informes que le son desfavorables, destacan las tres siguientes: a) sacar algunas frases de su contexto original para desvirtuarlas y hacerlas aparecer como ridículas, injustas y exageradas; b) exaltar cualquier detalle erróneo y contaminar todo el conjunto con él —«aquí se dice que nosotros poseemos una finca en Sevilla y todos sabéis que no es nuestra, sino que está arrendada, ¡pues así es todo este artículo, lleno de mentiras como ésta, pura basura, es una demostración más de que la prensa siempre miente!»— y, al mismo tiempo, claro está, omitiendo el comentar los hechos irrefutables del texto analizado; y c) aplicarse a uno mismo, de forma interesada y manipuladora, conceptos y frases generales y/o referidas a otros —«aquí se habla de que hay sectas en las que se prostituye a los adeptos, pero eso es mentira, en nuestro grupo no hacemos tales cosas, por eso no somos un secta y eso demuestra cómo mienten todos los que nos atacan»—, que en ningún momento les han sido adjudicadas.
Así, pues, debe tenerse por seguro que cualquier información que cuestione a una «secta» —pero también a cualquier institución religiosa, política o de alto contenido emocional— siempre será tildada de falsedad por ella y sus acólitos. Valga como ejemplo mi propia experiencia: por los datos publicados en mis libros he sufrido alrededor de un centenar de procesos judiciales iniciados por dirigentes de sectas y, a pesar de haber ganado todos los pleitos —demostrando sin lugar a dudas que mis informaciones son veraces— y, a más abundamiento, de haber hecho procesar y condenar a algunos de esos responsables sectarios, éstas siguen contando a sus adeptos que yo falto a la verdad... Y, lamentablemente, en la misma tesitura me he tenido que ver a partir de la publicación de mis libros críticos sobre la Iglesia católica, aunque en este caso, dada la radical contundencia de mis datos, nadie se atrevió a demandarme, aunque sí a difamarme desde los medios eclesiales[i]. El sectarismo, ya lo dijimos, no solo es patrimonio de las «sectas».
En cualquier caso, sea la que fuere la opinión de los sectarios, debo insistir en que solamente debe emplearse información basada en hechos reales y pruebas tangibles. Saber dónde encontrarla y cómo distinguirla será tan fundamental como difícil, pero no imposible. En potencia existen muchas fuentes para poder documentarse —libros, revistas y opúsculos especializados —ya sean de carácter científico o divulgativo—, webs específicas en Internet, informaciones periodísticas, material de las propias sectas, documentos administrativos o judiciales, etc.—, pero hay que saber seleccionarlas según sus diferentes grados de interés y estar en condiciones de superar las dificultades de acceso que puedan presentar cada una de ellas.
Los libros son herramientas imprescindibles para poder adquirir una visión de conjunto, rigurosa, amplia y ordenada, de la problemática sectaria y, también, quizá, para acceder a informaciones ya elaboradas sobre el grupo específico que interese en cada caso particular. 
A la hora de elegir un libro, particularmente si no se tienen referencias sobre su posible calidad, puede ser útil dejarse guiar un poco por los datos biográficos del autor que figuren en una pestaña de su cubierta u otro lugar, por la estructura y contenido del índice, y por la editorial (las hay más o menos serias, o que están adscritas a determinadas creencias —generalmente religiosas— que le confieren un sesgo muy notable a todo lo que publican; así, por ejemplo, los autores de orientación católica, que suelen referirse a las «sectas» bajo la denominación de «Nuevos Movimientos Religiosos» o NMR, con frecuencia parten de supuestos de supremacía de su fe que son incompatibles tanto con la objetividad y neutralidad que se requiere para abordar un problema psicosocial como el de las «sectas», como con el respeto y trato igualitario que se le debe a todas las creencias). 
En la bibliografía final de este trabajo se reseñan decenas de libros y artículos de revistas científicas que pueden ser de interés, pero no son los únicos, ni mucho menos, ya que los textos que tratan esta cuestión se pueden contar por miles (otro asunto bien distinto será su rigor y calidad). 
Algo tan aparentemente simple como es buscar un libro, puede convertirse en un calvario, incluso para quienes, como este autor, trabajan con libros y compran varios cientos cada año. ¿Cómo saber que un libro sobre un determinado tema o de un cierto autor existe? Un recurso es hacer búsquedas específicas sobre la base de datos del ISBN (en España), que es un registro oficial en el que aparecen las fichas de absolutamente todos los libros editados en el país; puede consultarse a través de un librero o directamente en Internet. Lo mismo puede hacerse con los registros similares de cada país. Las librerías virtuales, las webs de algunas editoriales y otras especializadas en temas concretos, también ofrecen un amplio catálogo informatizado de rápido y cómodo acceso a través de la red. El mismo tipo de acceso electrónico permite bucear también en las librerías públicas y universitarias (éstas, a su vez, permiten localizar artículos científicos)... Cuando uno se encuentra con cientos de títulos en la pantalla del ordenador comienza a arrepentirse de haber iniciado la búsqueda... ahora hay que seleccionar los que más se ajusten a las necesidades de cada momento.
Con el comercio electrónico ya se pueden comprar fácilmente libros en todo el mundo, a través de Internet, desde los propios catálogos que han permitido localizarlos. Si nos atenemos al método tradicional, ir a la librería de la esquina, nos encontraremos casi seguro con un primer problema cuando se busque un libro que no sea «novedad», eso es que se haya publicado hace algunos meses o años; la mayoría de esos textos ya no existen en los estantes de la librerías —por un evidente problema de espacio y comercialización que prima a los últimos libros editados— y los malos libreros suelen sacarse de encima al cliente diciéndole que «está agotado», pero, en realidad, ese texto que no tiene el vendedor en su mesa lo mantiene el editor en su almacén y, por tanto, se puede conseguir. Los caminos para hacerse con él son muchos; por ejemplo, pedirle al librero habitual, o a la librería más importante y que dé mejor servicio en la ciudad, que lo encargue a la empresa editora o a su distribuidor local; también se puede llamar por teléfono directamente a la editorial —o comunicarse con ella a través de su página web o e-mail— a fin de que suministre el libro ella misma o indique dónde poder conseguirlo.
 En las bibliotecas públicas no están todos los libros, ciertamente, pero quizá se encuentren los suficientes. Puede facilitar las cosas el pedirle consejo al bibliotecario/a acerca de lo que se está buscando; los hay muy amables, tanto, que no pocas veces toman nota del libro que no tienen en existencia, lo compran y lo ponen a disposición de sus lectores.
De todos modos, no resulta recomendable leer exclusivamente libros críticos con las «sectas», lo mejor será ampliar horizontes leyendo textos que permitan comprender mejor los contornos del problema que nos atañe. Algunos textos bien seleccionados sobre psicología, religiones —en especial tratados sobre religiones comparadas—, filosofía —oriental y occidental—, yoga, metafísica o —¿por qué no?— esoterismo..., ayudarán a formarse una base de conocimientos que podrá mejorar la comunicación y entendimiento con un sectario (al tiempo que mejorará la comprensión y la tolerancia con las creencias ajenas).
Una fuente de datos muy notable que no puede dejar de usarse es la propia literatura editada por la secta —libros, revistas, folletos, etc.—, puesto que servirá tanto para saber qué y cómo piensa el familiar sectario —y, por tanto, permitirá aproximarse más íntimamente al núcleo de su mundo personal—, como para detectar incongruencias, promesas incumplidas, falsedades, abusos, actitudes irracionales y/o delictivas, puntos razonables en los que puede estarse de acuerdo y un largo etcétera de elementos que sin duda serán importantes a la hora de intentar abordar la salida del sectario de su grupo. 
No conviene, por tanto, caer en ninguna de las dos actitudes —habituales en las familias afectadas— siguientes: a) romper cuanto papel de la secta se localice (antes al contrario, hay que guardarlos todos en un lugar seguro, ya sea el original o en fotocopia); y b) perseguir al sectariopara confrontarlo continuamente con sus propios textos (según los casos, será bueno discutir suavemente sobre ellos, pero nunca adoptar posturas radicales contra ellos). 
La literatura más interesante será siempre aquella que está reservada para uso de los adeptos y, mucho más aún, la que es de uso exclusivo de los dirigentes y/o sólo puede ser consultada dentro de los centros sectarios; en este tipo de documentos suele encontrarse parte de ladinamita que ayudará, en el momento adecuado, a abrir el camino hacia el abandono de la secta. Los textos propagandistas y públicos, aunque aportan menos datos, también pueden tener diferentes usos: informar sobre actividades y relaciones de la secta, mostrar cambios importantes de actitud y/o de imagen a lo largo del tiempo, acreditar incumplimientos de promesas, etc. Todo, hasta lo más nimio, puede ser de alguna utilidad en manos de un buen experto. Resulta siempre una buena idea el abrir un archivo propio —en algún lugar que no sea accesible para elsectario— para guardar todos los datos que se encuentren a propósito del caso; un día, en el futuro, harán un gran servicio. 
Las noticias de prensa también pueden ser una fuente de información interesante, pero, lamentablemente, debido a las prisas y superficialidad —y/o falta de profesionalidad— que domina el trabajo periodístico de actualidad, son habituales los errores de bulto y los disparates de alto riesgo. Es aconsejable, en principio, poner en cuestión cualquier información que no aparezca suficientemente acreditada y, en todo caso, debería intentarse seguir el hilo de las noticias más notables para conocer como acaban, dado que son corrientes los titulares sensacionalistas que, tiempo después, se quedan en nada (y los propios medios de comunicación ya no se ocupan de corregir). 
De todas maneras, para un buen lector, las noticias de prensa facilitan una cantidad de información suplementaria que resulta fundamental para trabajar con rigor: se menciona a personas relacionadas con el asunto que quizá valga la pena localizar y contactar, se apuntan hechos —acciones judiciales, etc.— que puede resultar importante ampliar, o lugares a los que puede ser conveniente ir... tomar en consideración esas pistas suele acabar arrojando resultados bien sorprendentes.
La búsqueda de informaciones ya publicadas en archivos y hemerotecas no es sencilla. Los buenos archivos sobre el mundo de las «sectas» son privados y su acceso está limitado; las hemerotecas públicas y las de los medios de comunicación no suelen tener aún índices temáticos informatizados —o son muy recientes o incompletos— y resulta prácticamente imposible encontrar una noticia determinada si no se sabe de antemano en qué medio y fecha fue publicada. 
Hoy en día, Internet es una fuente obligatoria a la que debe acudirse para casi todo y, cómo no, también para recabar información sobre «sectas». En la red de redes hay centenares de webs dedicadas a este tema y empleando un buscador —es aconsejable usar varios, ya que no todos encuentran lo mismo— y tecleando las palabras clave que se considere oportunas —genéricas como «secta» y su equivalente en otros idiomas, o particulares como el nombre del grupo que se busca— se localizan sin problemas. Las webs tienen los contenidos más diversos: recopilaciones de artículos de prensa, testimonios de ex adeptos, informes públicos y privados, bibliografía, consejos, direcciones, links para acceder a otras páginas relacionadas; las hay generales y específicas; rigurosas y panfletarias; particulares y de asociaciones o instituciones, tanto favorables como contrarias a las «sectas»; y, claro está, todas las sectas más o menos importantes tienen también su propia web propagandística (a la que siempre es recomendable acceder porque suele encontrarse información interesante para comprender mejor la conducta del familiar o amigo sectario). También hay muchos chats de ex miembros de diferentes sectas con los que se puede dialogar.
Pero será necesario remarcar con toda la fuerza posible que, de las miles de informaciones sobre «sectas» que circulan por Internet, una parte muy importante de ellas son inexactas, cuando no simples rumores, intoxicaciones o burdas mentiras, a menudo propiciadas por el deseo de venganza de ex miembros defraudados y avaladas por expertos sin escrúpulos. Debe extremarse muchísimo el cuidado cuando se maneja información procedente de la red.
Alrededor de la problemática de las «sectas» se ha instalado una especie de camarilla internacional de «expertos» que ha llegado a conformar una espiral que se retroalimenta de sí misma, propiciando un extendido comportamiento acrítico en el que se da por cierta cualquier información que circule por ese circuito de «expertos» que, a su vez, se avalan a sí mismos en la misma medida con que encuentran creyentes para sus denuncias que, al ser aceptadas, adquieren cada vez más credibilidad por sí mismas y, a través de sucesivas repeticiones endogámicas, en diferentes medios y ámbitos, se fortalecen y se erigen en valedoras capaces de autentificar cualquier nuevo dato que confirme las presunciones iniciales… y así hasta el infinito. 
En este sin sentido, Internet —como fuente primaria de datos básicos— aporta las pruebas indiscutibles a los medios de comunicación, y éstos, al publicarlas, configuran una especie de aval que acaba por confirmar la veracidad de la información propagada desde la red. Si uno recorre con atención las diferentes webs que tratan sobre «sectas», puede darse cuenta del apoyo viciado que se produce entre datos —falsos— procedentes de la red que son publicados en un medio de comunicación y recogidos luego, por la misma web, desde el trabajo periodístico, con el fin de consolidar y dar credibilidad a sus propios datos iniciales, que eran incorrectos. El mecanismo viene a ser más o menos así: en la web W se publica una información falsa sobre la secta S; un periodista accede a ella y la publica en el periódico P dándola por veraz al proceder de W; finalmente, la web W recoge lo dicho por el periódico P y presenta sus propios datos falsos sobre S como veraces dado que los ha publicado P. En el futuro esa mentira «avalada» correrá como la pólvora por todos los medios de comunicación, webs y «expertos» que se ocupen del asunto concreto.
Otra forma de conseguir información es contratando los servicios de un investigador privado, pero esta medida sólo es aconsejable en unos pocos casos muy concretos y teniendo en cuenta las dos premisas siguientes: a) las tarifas que suelen cobrarse en este sector son elevadas y, con frecuencia, muy desproporcionadas respecto al trabajo entregado; y b) si bien existen excelentes profesionales, este sector está trufado de sujetos con pocos o ningún escrúpulos que sangran económicamente a sus clientes y, a menudo, les engañan con datos absolutamente falsos. Si uno está en condiciones de llamar a la puerta de un detective de confianza, es probable que le aporte algo interesante; pero, si tiene que dejarse guiar por el azar, mejor pensarlo dos veces antes de hacerlo. En todo caso, la prudencia recomienda solicitar siempre informes por escrito de sus trabajos y no pagar nada si no es contra la entrega de una factura válida. Conviene informarse bien antes de contratar los servicios de un detective y, ante las dudas, siempre puede acudirse al departamento de la Policía encargado de controlar este sector profesional[ii].
De ser necesario, debe tomarse todo el tiempo que haga falta para adquirir la mayor cantidad posible de información acerca de la «secta» bajo sospecha, pero, sobre todo, debe procurarse por todos los medios separar los hechos reales y probados de aquellos que carecen de fundamento, sólo así podrá evitarse caer en un alarmismo infundado que siempre acaba complicando la situación familiar y, en ocasiones, llega a convertir un conflicto en irreversible, o poco menos. Si se recurre solamente a informaciones correctas y veraces, todos, familiares y sectarios, saldrán ganando con ello. 

[i] Libros como La vida sexual del clero —que no sólo supone un ensayo riguroso sobre la cuestión del celibato católico y de la vida afectivo-sexual del clero, sino que denuncia, con nombres apellidos y profusión de pruebas incontestables, a sacerdotes y altos prelados actuales implicados en escándalos y delitos sexuales, casi siempre encubiertos— o Mentiras fundamentales de la Iglesia católica —que evidencia las tremendas manipulaciones y falsificaciones que dieron origen al dogma católico—, han sido prohibidos (para los creyentes) por la cúpula católica española, pero jamás han sido rebatidos. De hecho, desde la mediocre y ultraconservadora cúpula eclesial católica, se ha llegado a decir que tales libros eran la punta de lanza de «una campaña anticlerical para preparar una situación parecida a la que dio origen a la Guerra civil española» ¡¡¡¿?!!!, verdaderamente demencial; o, en el periódico conservador ABC, Santiago Marín, en marzo de 1995, escribió que «Hay, no me cabe duda, una fortísima campaña contra la Iglesia. Se trata de hacer salir a la luz los defectos de los eclesiásticos, especialmente relacionados con asuntos sexuales. Son libros, denuncias, programas de televisión o de radio. Va dirigida a minar el prestigio de la jerarquía, presentándola como una oligarquía hipócrita que mantiene una fachada de elevada doctrina para los demás que no cumple ella misma. Destapada la campaña habría que preguntar por qué existe y quién la mueve...», esta misma filosofía y estructura de texto es la que encontramos en todos los panfletos de sectas destructivas cuando se defienden de las críticas que se les formulan ¿casualidad? Frente a tal sectarismo institucional, algunos obispos y teólogos, cientos de sacerdotes y miles de creyentes han leído, avalado y apoyado ambos libros, convertidos en best-sellers, a pesar de tratarse de ensayos, en todos los países europeos y latinoamericanos que se han publicado. 
[ii] Los interesados en conocer la legislación que controla esta práctica profesional en España, pueden consultar la completa recopilación legislativa que se recoge en Morales, F. y Marco, F. (1999). Código de seguridad privada. Pamplona: Aranzadi. 

martes, 1 de mayo de 2012


ES INTERESANTE SABER COMO FUNCIONA EL MUNDO DE LAS SECTAS Y PARA QUE NO ENTREIS EN NINGUNA QUE HOY EN DIA EXISTEN EN TODAS LAS CIUDADES Y PUEBLOS .
SECTA: conjunto de seguidores de una parcialidad religiosa o ideológica. Doctrina religiosa o ideológica que se diferencia e independiza de otra. Conjunto de creyentes en una doctrina particular o de fieles a una religión que el hablante considera falsa.
Cuando sales de un grupo sectario comienzas a descubrir el valor tan grande que tiene la libertad de las personas. Todos somos libres y nadie, absolutamente nadie, tiene derecho a manipular a otros.
Hay sectas denominadas peligrosas debido a que manipulan tu mente de tal forma que los líderes de estas sectas consiguen hacer lo que ellos quieren que tu hagas. Para hacer esto utilizan diferentes tipos de métodos aunque no todas estas sectas utilizan todos los métodos sino que sólo utilizan algunos.
Durante estas páginas veremos un testimonio anónimo de una persona que ha vivido en una de estas sectas no dice cual pero da lo mismo. también hablaremos sobre los testigos de Jehová denominada también una secta peligrosa (marrón).Yo personalmente considero a esa persona muy fuerte porque ha tenido el valor de salir y enfrentarse de nuevo a todo lo que había abandonado.
La idea principal de los grupos sectarios es la de aislarse del mundo, de la sociedad alegando los líderes que lo mundano es malo. En lo que más trabajan es en la meditación, el silencio y la oración prometiendo la santidad.
Pero usted se preguntará:
¿qué es lo que pretenden? ¿por qué lo hacen?
Es muy sencillo lo hacen con ánimo de lucro porque sino no hay motivos por el cual manipulas la mente de las personas para que hagan lo que tu quieres.
Lo que pretenden es anular ala persona. En el testimonio anónimo en una conversación con su madre una vez dentro le dijo esta persona a su madre: “Nosotros cambiamos la personalidad de la gente por otra que le ayude a ser más fuerte ante los problemas del mundo” en esto el autor del testimonio dice que hay tres fallos:
1º) Nadie tiene derecho de cambiar la personalidad a otro, sea cual sea la excusa.
2º) No es cierto que se adquiera una personalidad más fuerte, sino más débil; pues se le enseña a huir de los problemas, no a enfrentarlos.
3º) Cambiar la personalidad no es bueno, como yo creía. Cada uno cambiará cuando quiera, no cuando le manejen desde fuera. Y cada cual es como es. Este cambio de personalidad no es otra cosa, en realidad, que una ANULACIÓN DE PERSONALIDAD.
¿por qué anulan la personalidad?
Sencillamente porque una persona nula es alguien a quien se puede manipular. Y si puedes manipular a alguien le pones a tu entera disposición.
Los líderes de las sectas están sedientos de poder; y se lo transmiten a sus adeptos para que manipulen a otros.
Se trata de crear fanáticos. Un fanático no se detiene ante nada ni ante nadie. El ansia de poder le absorbe y esclaviza sin que se de cuenta. Los líderes de estas sectas son fanáticos que crea fanáticos.
Este es el sistema empleado para determinar la peligrosidad de cada secta, y es usado como plantilla en cada 'por qué este grupo es una secta'.
UN SISTEMA PSICOLÓGICO COERCITIVO
Criterio para determinar si un grupo es una secta peligrosa
PROPIEDADES COMUNES DE SECTAS POTENCIALMENTE DESTRUCTIVAS Y PELIGROSAS
El líder tiene la autoridad suprema. Él o ella puede delegar ciertos poderes en unos pocos subordinados con el propósito de que los miembros se adhieran a los deseos y órdenes del líder. No hay apelación posible fuera de su sistema a otros sistemas de justicia que estén por encima.
La organización de los Testigos está dirigida por el Cuerpo Gobernante del Esclavo Fiel y Discreto, por debajo de este grupo de personas están los Ancianos, que dirigen los asuntos de cada comunidad de fieles. En otros tiempos (los de Russell o Rutherford) sólo había un líder absoluto. Los líderes son la máxima autoridad y aquel que les contradiga será expulsado de la organización, como varios Ancianos han comprobado en su propia persona. Los líderes interpretan la Biblia según su criterio y capricho, y lo que antes era bueno (donar sangre, Russell alababa está acción) hoy puede ser un terrrible pecado (donar sangre, Rutherford lo prohibió).
Los líderes sectarios tienden a ser carismáticos, decididos y dominantes. Ellos persuaden a sus seguidores a abandonar sus familias, trabajos, y amistades para seguirles. El grupo, y no el individuo, toma control de las propiedades de sus seguidores, su dinero, y sus vidas.
En muchas ocasiones los Testigos deben renunciar a comunicarse con los no-Testigos, y separarse de sus parejas si estas rehusan unirse a la secta. Las finanzas suelen controlarse desde el Salón del Reino.
Los líderes sectarios son mesías autoproclamados que presumen de tener una misión especial en la vida.
Cuando se produzca la Segunda Venida de Cristo (el tan cacareado fín del mundo), los Ancianos formarán la jerarquía que regirá el planeta durante el Milenio. O al menos, habrán 144000 justos que se dedicarán a ello, y serán escogidos de entre los líderes.
El líder sectario centra la veneración de sus adeptos hacia sí mismo. Sacerdotes, rabinos, ministros, líderes democráticos y de movimientos realmente altruistas dirigen la veneración de sus seguidores hacia Dios, principios abstractos, o el bien común. Los líderes sectarios, en cambio, se proponen como el objetivo del amor, devoción, y adhesión de sus seguidores.
Este criterio no se cumple, lo que no niega que se trate de una secta.
La secta tiende a ser totalitaria en el control del comportamiento de sus miembros. Las sectas acostumbran a dictar con gran detalle cómo deben vestir sus miembros, qué deben comer, cuándo y dónde trabajar, dormir, o ducharse, así como lo que deben creer, pensar y decir.
La secta suele tener una doble moral. Por un lado los miembros deben ser abiertos y honestos con el grupo, y confesarlo todo a sus líderes. Por otro lado, se les anima a mentir y manipular a los no-miembros. Las religiones establecidas enseñan a sus miembros a ser honestos con todo el mundo, y regirse por una sóla moral.
Existen numerosos testimonios de fraudes a los no-miembros por parte de Testigos, aunque no parece una práctica 'oficial'. De todos modos, al predicar de puerta en puerta no se suelen identificar a la primera como Testigos.
La secta tiene dos objetivos básicos; reclutar nuevos miembros y conseguir dinero. Las religiones establecidas y movimientos altruistas pueden también reclutar y conseguir dinero, pero su único objetivo no es su propio crecimiento sino mejorar las vidas de sus miembros y semejantes. Las sectas pueden presumir de hacer contribuciones sociales, pero en realidad se quedan en la presunción, o en meros gestos. Sus objetivos siempre estarán encaminadas al reclutamiento y hacer dinero.
La predicación de puerta en puerta es obligatoria para todos los Testigos, y siempre van uno experto acompañado de otro más novato. Como sólo los testigos van a salvarse, deben sentirse responsables de las almas que van a condenarse por culpa de que ellos no se han preocupado por salvarlas. Se culpabiliza al adepto que no contribuya a la 'causa' de cualquier modo posible. En cada reunión del Salón del Reino se repasan las cuentas y las ventas de literatura que se han realizado. Se hacen cursillos para aprender a 'colocar' revistas y libros, y cada adepto (no basta con uno sólo por familia) debe comprar todos los ejemplares que se publiquen, a veces por duplicado para quedarse con uno y regalar el otro a un no-adepto. Con estas técnicas se consiguen varios millones de pesetas cada año, libres de impuestos. Además, la secta ofrece préstamos a sus miembros, para que compren locales que luego disfrutará la organización, de modo que sólo paga el adepto.
La secta aparenta ser innovadora y exclusiva. El líder afirma romper con la tradición, ofreciendo algo novedoso, e instituyendo el único sistema viable de cambio que solucionará los problemas de la vida o del mundo. Mientras afirma todo esto, subrepticiamente utiliza la coerción psicológica sobre sus miembros para inhibir su capacidad de examinar la validez de las presunciones del líder y su secta.
Se presentan como un grupo de gente que estudia la Biblia. Pero tal estudio se reduce a aprender las interpretaciones que los líderes han estipulado, sin ningún interés en que sean los estudiantes los que hagan su propia interpretación. Ellos son los únicos que sobrevivirán al Juicio Final, así que son el único sistema viable. Toda crítica es considerada una influencia del diablo, y se enseña a los adeptos a no dudar jamás de la doctrina (eso quiere el Enemigo, que dudéis, para poder confundiros!).
EL TERCER CRITERIO
Éste tercer criterio define otros elementos comunes de los sistemas de coerción, aquí veremos ocho puntos pero más adelante podremos leer otros. Los que veremos ahora son los más utilizados por todas las sectas denominadas peligrosas.
CONTROL DEL MEDIO*
Limitación de todas o algunas de las formas de comunicación con aquellos ajenos al grupo. Libros, revistas, cartas, y visitas a los amigos son tabú. 'Ven y aíslate'.
A los Testigos se les recomienda ver poca televisión, y no leer nada más que lo publicado por la editorial Watch Tower. Nada de libros, ni siquiera comics, ya que la fantasía es considerada peligrosa y un arma del diablo. Se anima a los niños para que no hagan amigos en clase. Los amuletos de la suerte, libros de arqueología, revistas de ocultismo, el ejército, y mil cosas similares, son cosa del diablo.
2. MANIPULACIÓN MÍSTICA*
*El converso potencial al grupo llega a ser convencido más allá de la duda del elevado propósito, del destino especial del grupo, a través de un profundo encuentro/experiencia. Por ejemplo, a través de un supuesto milagro o palabra profética de aquellos en el grupo.
Se supone que el fundador de la secta tuvo una revelación que anunciaba el fín de los tiempos en breve. Se han dado media docena de fechas distintas, una tras fallar la otra, y todavía no han acertado. Finalmente renunciaron a decir la fecha; pero el fín lo verá la generación actual. Constantemente interpretan cualquier acontecimiento (guerra del Golfo, conflicto palestino...) como una señal del cumplimiento de las profecías del Apocalipsis.
3. DEMANDA DE PUREZA*
*Un objetivo explícito del grupo es producir cierta forma de cambio, sea a nivel global, social, o personal. 'La perfección sólo será posible si uno permanece con el grupo y se entrega'.
Como sólo los Testigos van a salvarse, es un grave error no unirse a ellos. Cumplir todas las leyes y prohibiciones, así como contribuir económicamente o predicando, es vital para conseguir la salvación. Hay que dejar atrás la vida y costumbres anteriores, y ser capaz de sacrificar a tus hijos negándoles las transfusiones.
4. CULTO DE CONFESIÓN*
*La poco saludable práctica de exponerse a los miembros del grupo, a menudo en el contexto de una reunión pública, admitiendo pecados pasados e imperfecciones, incluso dudas sobre el grupo y pensamientos críticos acerca de la integridad de los líderes.
Los miembros se vigilan unos a otros, para evitar que se desvíen del 'buen camino', y se chivan constantemente a los superiores. Dudar siquiera de la doctrina oficial es un grave pecado.
5. CIENCIA SAGRADA*
*La perspectiva del grupo es la verdad absoluta y completamente capaz de explicar TODO. La doctrina no está sujeta a mejoras o críticas. La conformidad ABSOLUTA con la doctrina es necesaria.
El que duda es expulsado.
6. CARGA DE LENGUAJE*
*Un nuevo vocabulario emerge en el contexto del grupo. Los adeptos 'piensan' en parámetros estrechos y muy abstractos, propios de la doctrina del grupo. La terminología previene suficientemente el pensamiento crítico reforzando una mentalidad en 'blanco y negro'. Los clichés y respuestas preparadas introducen prejuicios mentales.
El antes mencionado libro es un buen ejemplo de la adquisición de clichés y consiste en una serie de respuestas preparadas que liberan al cerebro de la penosa tarea de razonar por sí mismo. Esto se amplía por toda la literatura que deben comprar y leer, en la que se machaca constantemente lo que deben pensar.
7. DOCTRINA SOBRE LA PERSONA*
*La experiencia previa al grupo y dentro del grupo es interpretada de forma rígida y decisiva por medio de la doctrina absoluta, incluso cuando la experiencia contradice la doctrina.
8. DISPENSIÓN DE LA EXISTENCIA*
*La salvación sólo es posible dentro del grupo. Aquellos que lo abandonen están condenados.
Sobran comentarios. Cuando el día llegue los Testigos vivirán para siempre en un paraíso, y todos los demás serán aniquilados por ese Dios que es todo amor.
Testigos de Jehová - Editorial Atalaya
Es un grupo religioso bastante conocido tras el cual se halla una poderosa organización editorial. Antaño conocida como la Watchtower Bible And Tract Society, actualmente hay 4.5 millones de Testigos en más de 100 países. La parte más nociva de su doctrina es la referida al rechazo a las transfusiones de sangre, que de vez en cuanto causa la muerte de algún niño y los medios se hacen eco. Piensan que 'beber sangre' es algo blasfemo.
Su principal creencia es que el Armagedón, o Fín del Mundo está muy muy cerca. Se anunció para 1914, 1925, y 1975. Despues la fecha se ha mantenido en secreto, suponiéndose para 1992, aunque actualmente ellos admiten que sólo el Señor conoce el día y la hora pero que quedan pocos días y hay muchas señales que lo atestiguan. Sólo ellos sobrevivirán, el resto serán aniquilados para siempre (no creen en la inmortalidad del alma), y ellos vivirán eternamente en una Tierra convertida en Paraíso.
La 'Sociedad' se fundó en 1879 por un empresario de Pennsylvania llamado Charles Taze Russell. Dejó el cristianismo para interesarse por religiones orientales y la piramidología, y despues se unió a los Adventistas del Séptimo Día, otra secta apocalíptica que aún subsiste. Tras la muerte de Russell en 1916, el movimiento pasó a ser dirigido por el 'juez' Rutherford, que construyó una mansión en San Diego para cuando resucitasen Noé, Isaac, David, Gideón, y Josua.
Disponen de una amplia lista de prohibiciones que son cambiadas en cuanto así se publica en sus revistas, de compra casi obligatoria para luego intentar vender puerta a puerta.
Estructura
La teocracia de los Testigos de Jehová está estructurada en 11 escalones o grados, que son: Jehová Dios, Jesucristo, Clase del esclavo fiel y discreto, Cuerpo Gobernante (compuesto por 11 miembros ungidos), Siervo de Zona, Siervo de Sucursal, Siervo de Distrito, Siervo de Circuito, Superintendente o Anciano de la Congregación, Siervo Ministerial, y Publicador (vendedor).
Los dos primeros escalones no se hacen oir muy a menudo, y están más que nada para que ellos puedan negar que son una secta, pues según su literatura un secta es un grupo de gente que sigue a un líder humano. El tercer escalón (que ni es esclavo ni fiel, aunque sí discreto) es el dictador dentro de un estado totalitario y policial hasta la médula, en que unos se espían a otros. Todos los cargos se eligen y nombran desde la central norteamericana, y es el mismísimo "espíritu santo" el que los nombra (le debe quedar más cerca trabajar exclusivamente en la central de los EEUU y no desplazarse por cada congregación para hacer los nombramientos).
En cada país se monta la estructura legal de modo que los nativos dan la cara oficialmente y los norteamericanos dirigen el negocio y se llevan los beneficios. Prácticamente todos los Siervos de Sucursal (dirigente de país) son americanos. El Presidente y su Cuerpo Gobernante vigilan al milímetro a todos los Siervos de Zona, los cuales visitan y controlan a los Siervos de Sucursal, que a su vez vigilan continuamente a los Siervos de Distrito, que dos veces por año repasan cuentas con los Siervos de Circuito, que cada cuatro meses hacen lo propio con los Superintendentes. Estos vigilan de cerca a todos los Siervos Ministeriales, y estos no quitan ojo un día a lo que hacen los Publicadores, que a su vez se vigilan entre sí y consideran un privilegio denunciar que un colega (sea familiar, amigo, pareja, hijo...) ha transgredido alguna de las infinitas normas de la secta. (esto parece, sinceramente, el cuerpo de espionaje estadounidense sólo que con el fin de culpar al vecino y llevarse méritos entre sus superiores).
Los dirigentes conocen en cada momento el rendimiento económico de cada miembro, ya que entregan informes que incluso cuentan con datos y seguimiento de posibles nuevos miembros, y tambien su vida privada por medio de entrevistas personales y chivatazos. Ninguna congregación tiene contacto con las demás, si no es a través de representantes, de modo que están aislados y no saben más que lo que cuentan, manipulan, y ordenan sus amos y señores.
Prohibiciones
Pueden cambiar con el tiempo y sólo ofrecemos una muestra:
No se debe cantar nada que ensalce la patria, la bandera o cualquier otra cosa (se prohibe manifestar alegría cantando), ni mencionar a Dios.
No se deben leer novelas de ficción, ni libros mundanos, ni prensa mundana, ni oir radio o ver televisión, al menos es aconsejable no hacerlo.
Cuando se hace un regalo, nunca debe figurar el nombre o identificación de quien lo hace; ni en Navidad ni en el cumpleaños se deben hacer regalos.
Las mujeres no deben usar pantalones. Los hombres ni bigote, ni barba, ni pelo largo.
No se debe uno casar con quien no sea Testigo de Jehová (lo que ha provocado un suicidio en Valencia), ni se puede romper un compromiso matrimonial.
No debe celebrarse la Navidad ni el aniversario de bodas.
Hacer amistades íntimas es peligro de sectarismo.
No se puede acompañar a una boda a un familiar que no sea Testigo.
No se puede brindar levantando las copas.
No se puede ser deportista porque crea nacionalismo.
No se puede cazar o pescar por deporte.
No se puede participar en loterías o juegos por dinero.
No participar ni apoyar las Olimpiadas porque son adoración pagana.
No se pueden organizar fiestas sociales con amigos y menos aún con los no Testigos.
No puede bautizarse ni ser Testigo quien fume tabaco.
No se deben celebrar los cumpleaños.
No se debe dar limosna a los mendigos.
No se puede trabajar para ninguna otra religión.
No debe jugarse al ajedrez.
No se debe vestir de luto.
No hay que colaborar en campañas caritativas.
No hay que dejarse poner transfusiones de sangre ni suero, antes dejarse morir.
No se deben comer ni morcillas ni nada en lo que intervenga la sangre.
No hay que ir a hospitales religiosos para curarse.
Es obligatorio enseñar la Biblia a los hijos aun cuando sea preciso hacerlo con el látigo en la mano.
Es obligatoria la asistencia a las reuniones de los Testigos, so pena de ser castigado.
Hay que bautizarse como Testigo, de otra forma no hay posibilidad de salvación.
Hay que predicar siempre, aunque se esté cansado o sin ganas.
Hay que asistir a todas las asambleas.
No se puede llevar nada de oro.
No se puede servir en ningún ejército.
A continuación veremos los métodos que utilizan para manipular tu mente sin que te des cuenta, poco a poco:
¿ Cómo y por qué funciona el LAVADO DE CEREBRO?
En el hombre hay 4 niveles que, cada uno colocado en su lugar, hacen que se desarrollen correctamente.
- ESPIRITUALIDAD (Fe)
- INTELECTUAL (Razón)
- SENTIMENTAL (Sentidos)
- VEGETAL (Estómago).
La Fe es libre cada cual a de elegir lo que desee. Pero sí hacemos uso de los siguientes niveles muy a diario. Cuando vemos algo, razonamos si es bueno o no para nosotros. Si nos gusta, lo almacenamos en la mente, para recordarlo después; sino, fácilmente lo olvidamos. Si nos entusiasma, ponemos en ello nuestros 5 sentidos y nos encontramos felices. De esta forma los sentimientos quedan relegados a la razón; es decir, la mente razona y decide qué cosas deben mover los sentimientos.
Los métodos del LAVADO DE CEREBRO.
Estos métodos fueron desarrollados para alimentar la sed de felicidad que se ocasionó en la sociedad del siglo XX. A primeros de siglo el hombre se ve sin apoyos de ningún tipo. La Iglesia no respondía a las aspiraciones del hombre; el estado provoca desconfianza en todos los políticos; la familia no es el hogar donde se desarrolla el amor que enraíza a todo ser humano para desarrollar una afectividad sana y equilibrada; los valores humanos desaparecen, y se da mas importancia a aquellos que no los tienen; la enseñanza no es educativa: los profesores conseguían sus plazas más por sus conocimientos que por su humanidad y capacidad docente. De esta forma los conocimientos del hombre son poco profundos y malos.
Sin saberlo, el hombre del SXX busca ansioso esos valores que todos necesitamos. Como ovejas indefensas serán atrapadas por las fauces de lobos
que ofrecen esa felicidad; pero que, en realidad, babean esperando poder cazar a sus presas. Se inventaran las trampas más increíbles. Y esas trampas, enterradas que no se ven, son los métodos de manipulación mental o lavado de cerebro.
LA ACTUACIÓN DE LOS LÍDERES.
Es increíble ver como los métodos de manipulación se van perfeccionando por estos grupos. Son los mismos adeptos los que los perfeccionan. Ellos no los ven como métodos, sino como medios justificados por un fin doctrinal. Entonces ponen todas sus capacidades en emplear lo que les han enseñado y crear nuevos métodos.
Recuerdo un compañero, al cual aprecio mucho, y que utilizaba y perfeccionaba muchísimo el método de la presión por llamadas telefónicas. Consiste en llamar a alguien para invitarle a una sesión de fin de semana. La persona tiene dos opciones:
  • Acude un fin de semana, para quitarse esas llamada de encima.
  • Se pone nervioso, porque se siente perseguido.
Dirá usted: "Hay una 3ª mejor, llamarles, y decirles que te dejen en paz". Sí, pero no te dejan; mi compañero seguía llamando, aunque el chico a quien llamaba le había dicho que no quería saber nada de ellos, ni del grupo.
Pero, ¿por qué esto es así? ¿Quién está detrás de todo esto? Vamos a descubrirlo.
Un miembro de un grupo sectario es alguien que, poco a poco, va perdiendo su personalidad. La personalidad es la cualidad por la cual dirigimos nuestras acciones para construir nuestra vida. Cuando se va perdiendo, uno pierde también las riendas de su vida. La secta intenta convencer a sus miembros que sus decisiones son absurdas, y que hay personas dentro del grupo, con más experiencia, que sí que saben tomar decisiones. Cuando el adepto toma decisiones por si mismo es criticado, con alguna excusa (obediencia, por ejemplo). Pero cuando sus decisiones son decididas por algún superior a él, entonces es alabado. De este modo, es lógico que se apoye más en dejar sus decisiones a los superiores del grupo. Además, cuando así, lo hace, él se nota mejor; y a esa mejoría la llama consolación. Los superiores entonces aprovechan para convencerle que la obediencia es lo que construye al hombre. Y, de este modo, va perdiendo su personalidad.
Llega un momento en que el adepto se confía de lleno al grupo, y todas sus decisiones las toma desde el grupo. Recuerdo que cuando íbamos a salir, teníamos que decir a qué hora volvíamos, dónde íbamos a estar, con quién, y qué pensábamos decirle. Muchas veces no podíamos salir solos; íbamos dos o tres en grupo. Esta actitud de total dependencia convierte al adepto en un infante, en un niño, inseguro de sí mismo, una persona sin personalidad.
De esta forma es fácil afirmar que un adepto es como un robot dirigido por los superiores; y estos, a su vez, por otros aún más superiores. El líder dicta y manda la doctrina; utiliza para ello palabras de libertad, felicidad, amor, … (valores que todos apreciamos). No dirá directamente lo que hay que hacer, sino que provocará que se haga. Él no actúa directamente, sino a través de los adeptos. Así queda libre de culpa ante cualquier circunstancia adversa. Para que se haga una idea lo más aproximada posible, la relación entre el líder y el adepto es como un hipnotizador y su hipnotizado.El hipnotizado puede hacer cuanto le pida el hipnotizador, pero en ningún momento es dueño de sus actos. La programación mental es, en realidad, un proceso lento de hipnosis, hasta lograr que el miembro esté bajo las órdenes del líder.
Nos enfrentamos así a un problema social que tiene más repercusión de la que puede verse a simple vista. Si hemos logrado entender que una persona con disminuciones psíquicas no es dueña de sus actos, ¿lo es alguien que ha sido manipulado? Sin embargo estamos en una sociedad que vive a años luz de poder entender esto.
LA PRESIÓN PSICOLÓGICA.
¿Dónde reside la fuerza principal de un grupo sectario? ¿Qué es lo que hacen para manipular a la gente sin que sé de cuenta?
"La fuerza está en el miedo y el sentimiento de culpabilidad que les infunden. Hay otros métodos; pero estos son básicos". Ahora le pregunto yo: "¿Qué es lo que subyace detrás de estos dos métodos tan importantes?" ¡Justo! ; la respuesta está en el título de este apartado: la presión psicológica.
El fanatismo en el adepto se va haciendo tanto más grande y peligroso cuanto mayor cree él el bien que hace. Causa miedo a los adeptos, a los otros; pero piensa estar haciéndoles un gran bien. Y aquí radica en gran parte el poder del miedo; o mejor dicho, del miedo sobre el miedo. ¿Qué quiero decir? Un adepto está asustado, vive asustado, y no hace más que transmitir su miedo.
La fuerza interior del miedo que este tipo de grupos infunda está en el contagio. Hacen creer a los adeptos que cuando enseñan, lo que reciben como doctrina, a los otros, entonces ellos se van perfeccionando hacia la santidad del dogma que se les enseña. El miedo, de esta forma, hace presa en ellos tanto hacia dentro como hacia fuera; hacia dentro cuando lo reciben, y hacia fuera cuando lo predican.
La otra punta de este doble filo es el sentimiento de culpabilidad con que se ataca a los miembros internos. Y el juego es el siguiente:
  • Se les propone algo inalcanzable.
  • Se les hace creer que sí pueden alcanzarlo, y se muestran ejemplos de personas que "dicen" que lo han alcanzado. A todo esto, nada es comprobable.
  • Se les ilusiona para que lo vivan.
  • Cuando no pueden vivirlo, se les acusa y culpabiliza.
  • De esta forma el individuo se siente débil, perdido, piensa que es malo, que hace daño (demasiado daño). Además se hacen ver más los defectos que las virtudes. Y no sólo son más visibles, sino que se exageran, para que la persona se sienta más culpable.
    En una secta todos los años hacían un mes de ejercicios espirituales, que consistían en estar un mes entero en silencio pero con un único día de descanso. Estos ejercicios no son buenos para la mente, por lo cual es otra manera de presión psicológica. ¡¡CUIDADO CON ESTOS EJERCICIOS ESPIRITUALES!!
    AGRESIÓN VERBAL.
    Nadie acepta a otra persona cuando esta llega utilizando un tono agresivo; más bien lo rechaza. ¿Por qué entonces en las sectas sí? ¿Por qué se consiente a un líder, o miembro con un cargo importante, utilizar un lenguaje agresivo y, a veces, insultante?
    Un predicador puede hablar de la bondad y el amor en un tono agresivo. ¿Hablar de amor con tono de odio? Después de hablar de lo bueno y maravilloso que es Dios, comenzó a discursear sobre lo malo que éramos nosotros. Recuerdo la frase: "Sois unos capullos". ¿Parecen dos discursos distintos, verdad? Pues no; ahora vino el casamiento de los "churras" con los "mecrinas". Y terminó diciendo: << Sois unos capullos; pero Dios os ama >>. Se suponía que debíamos emocionarnos en ese momento.
    Analicemos esta predicación, porque es un ejemplo maravilloso de cómo se usa la agresión verbal y por qué tiene tanto efecto. La agresión verbal sé acepta cuando utiliza halagos en su contenido. Es decir: se dicen cosas bonitas con un tono brusco. Y se provoca aquí el efecto de Pavlov: la campana es el tono, y la carne ahora son las palabras bonitas. Después desaparecen las palabras hermosas y aparecen los insultos. El público lo acepta porque el tono no ha cambiado. Y se sentirán culpables de no vivir aquello. ¡Efecto conseguido!
    ¡VIVIR AISLADOS!
    Una de las cosas que más suelen usar estos grupos es ocultar sus actividades, y explicar lo que hacen con "ideas del bien y de la felicidad". Se trata de convencer al miembro que debe olvidarse del mundo, vivir de cara al grupo. Porque el mundo le va a hacer daño.
    Al comienzo la idea de que vivan aislados se sugiere mucho a todos, y no tarda en dar su efecto. Pronto irán comentando lo bien que se sienten dentro, y la cantidad de preocupaciones que les desaparecen. En realidad, lo que hacen sin que se den cuenta es, ¡¡¡¡¡¡¡¡AISLARLES DEL MUNDO Y SUS PROBLEMAS!!!!!!!!
    ¿Cómo se logra este aislamiento? Dicen que el mundo está contaminado (con estas u otras palabras similares), y que, por tanto, como vienes del mundo, vienes con sus males. Dentro del grupo descubrirás la verdad, la felicidad, el amor, etc. Comienzan a utilizar un tono agresivo, con el pretexto de: "Has de quitar tus actitudes mundanas y aprender a amar. Aquí vamos a enseñarte". Y te añaden una explicación que está dentro de la doctrina del grupo. El mundo no es como lo ves (la realidad), sino como el grupo lo ve (la doctrina). Por tanto, recházalo y aprende a vivir la doctrina del grupo. Los que menos personalidad tienen son ascendidos de inmediato. Se dice de ellos que viven en santidad; en realidad son los más dóciles, los que se manejan con más facilidad, los que antes se aíslan del mundo y viven "según quiere el grupo". Los otros se dan cuenta de inmediato de esto; pero ahí estarán próximos los superiores para tacharles de envidiosos, orgullosos, o algo así.
    Los lideres organizan actividades de salida y ¿con que se encuentran? Con que unos salen y otros no. ¿Y por qué? Se preguntara. Pues muy sencillo los que se quedan sin salir son los que ponen más pegas y “exigen” un porqué.
    Se ha llegado a demostrar que cuando se aísla por completo a una persona, es muy común que esta adquiera ciertos trastornos psicológicos. El aislamiento de los grupos coercitivos es una de las causas principales de los trastornos con que se ven los adeptos cuando abandonan. el mejor método de recuperación es el de comunicarse de nuevo con el ambiente social: familia, amigos, trabajo, novia, etc. Muchos que estuvieron en grupos sectarios no logran recuperarse porque no vuelven a contactar con el ambiente; y más teniendo la idea de que es dañino. Y otros regresan, después de un tiempo fuera, por esto mismo o porque progresivamente vuelven a cortar con la atmósfera social.
    Por ello, antes de continuar, quiero dejar bien claro que si las cosas no funcionan como nos gustaría, no tenemos motivos de ningún tipo para aislarnos. Y digo esto desde la experiencia de haber sido rechazado y acosado por todo tipo de injurias. ¡No nos aislemos! ¡Luchemos!
    Hemos visto la idea que se da a los miembros de un grupo sectario para aislarse de la sociedad: "el mundo es malo".
    . Eran las 5:00 o 5:30 de la mañana. Nos levantábamos, y teníamos 1/2h para espabilarnos, ducharnos y desayunar. Después tendríamos que ir a la capilla. Allí se nos predicaba una hora, y teníamos 2 horas de silencio total para meditar lo que nos habían dado. A continuación venía el desayuno, que muchas veces hacíamos en silencio. Nos decían que, durante el día, hiciésemos el mayor silencio posible, para meditar todo aquello que nos habían dicho por la mañana. Si no lo hacías, te teñían de superficial, y te rechazaban: "¡Medita!". Lo importante era recordar en la tarde o en la noche lo que le habían dicho por la mañana en la predicación. De este modo no teníamos tiempo personal. Muchas veces se nos cuestionaba la atención que prestábamos a esa predicación. La forma de conseguir que no nos despistásemos era predicar nosotros mismos en la tarde o en la noche. Si el tema no era el mismo o la predicación no era buena, se nos corregía con dureza.
    Vamos a ver con un esquema como se les manipula y se les mantiene aislados todo el día, aún estando en medio de una ciudad.
    -Estado de cansancio.
    -Atender al tema, sin perder el hilo.
    -Meditando durante el día.
    -Preparar la predicación(tarde o noche).
    * Tensión de no olvidar lo que se dijo.
    * Tensión por decir algo parecido como uno preparaba.
    * Cansancio mental por el esfuerzo realizado.
    Cansancio, por dormir poco, con tanto trabajo.
    Muchos días soñaba ideas de aquella predicación.
    Aislamiento interior y exterior; en realidad, ¡huida del mundo!
    A esto se le llama caminar hacia la Santidad. ¡¡¡NADA MENOS QUE A ESTO!!! ! Cualquiera que esté medianamente cuerda se dará cuenta qué forma de manipular las cosas y las personas más rara y, a la vez, más efectiva. Una forma que no logra otra cosa que despersonalizar al público. ¡Qué bonito es, sin embargo, vivir libre! ¡Qué estupendo y que maravilloso poder opinar sin ataduras, sin esclavitudes, sin limites de ningún tipo! Y, por supuesto, ¡qué gran diferencia entre el que es feliz de verdad y el que se conforma con decir que lo es, sin serlo.
    PRESIÓN GRUPAL.
    Alguien preguntará: "¿Por qué no lo rechaza y se va?" Esto que parece tan fácil, para el adepto no lo es. Y lo entenderá ahora; decíamos que el grupo le va creando dependencia. Pero para crear dependencia el adepto no puede ver ni los métodos ni el mismo hecho de estar siendo dependiente. Entonces le saturan con cantidad de tareas y preocupaciones, de forma que su mente esta siempre ocupada y sus ojos pendientes de otras cosas. Si sucede algo raro, apenas tiene tiempo para examinarlo y actuar debidamente. Y si se le escapa algo de esto, le recriminan como orgulloso, le rechazan y le miran con malos ojos, como a quién a cometido una barbaridad. Como está débil, le resulta más fácil aceptar lo raro que rechazarlo y enfrentarse al alud de problemas que se le vienen de inmediato. Claro, que al aceptarlo, se vuelve más débil, más vulnerable y, también, más dependiente del grupo. Poco a poco, y por este mismo proceso, irá aceptando auténticas barbaridades hasta llegar a donde sea. Así programado, así fanatizado, actuando por fuera como alguien totalmente normal, o incluso más simpático que nunca, se puede esperar de él cualquier cosa.
    La máscara fruto de la presión grupal.
    Para el adepto es muy importante cómo lo ven los demás, de cara a atraer a otros hacia el grupo. Y tal apariencia, llega en algunos casos a llamarse libertad de los demás. Incluso se hace uso de frases bíblicas: <<Me hago todo a todos para ganar a los más que pueda>>, para corroborar y apoyar tal enmascaramiento. El adepto esta convencidísimo de que hace un gran bien siendo otra persona que no es. Y tiene, además, una excusa perfecta para ello: por el bien del otro.
    Hay dos detalles bien importantes a tratar aquí.
    1º) El afán por conseguir otros adeptos.
    2º) La despersonalización.
    Todos cuando vemos algo bueno intentamos atraer a los demás. El adepto ve como bueno su grupo. Lo raro es lo que más adelante entenderá; y lo otro lo ha entendido ya. Él está realmente mal, y no sabe por qué. Hace un esfuerzo titánico por estar bien, y, sobre todo, por disimular que lo está. Hace cualquier papel con tal de conseguir que otros se sientan atraídos por el grupo. Con eso se gana después el aprecio de los del grupo, y logra de este modo disminuir el aguijón de su malestar. Digamos que le alivia el dolor. Sin saberlo, esos pequeños alivios son los que hacen que pueda continuar en un grupo donde todo es mentira, y ya no sabe ni siquiera quien es él.
    Tal clima de mentiras, que muchas veces son interpretaciones, acomodadas a los intereses del grupo, de los hechos hace que vaya perdiendo su personalidad. No sólo no sabe quien es, tampoco sabe qué hacer, hace lo que ve hacer al grupo, desde el líder principal hasta los más inferiores. Hace lo que valoran dentro, aunque sea mentira y tenga que disimular. Si está mal y no es el momento de decirlo, por el rechazo que le provocará, disimulará que está bien, y tendrá que asumir solo su malestar. Y no es que sea fuerte para ello. Así se despersonaliza más y más. Todo es un caos. Y es ese caos interior, que le están provocando, el que aprovechan los líderes para acusarle y manipularle. Es ese caos el que les sirve de trampa para decirle: "Muévete, y haz lo que dice él grupo". Se mueve, como un pequeño guiado por sus padres, sin saber a donde ni por que va; pero, piensa, que por lo menos se mueve.
    Los líderes culpan a los inferiores de lo que ellos mismos sufren; pero aquellos tienen un alivio que estos no tienen: ser líderes. Y esto queda destapado cuando les quitan el liderazgo. Entonces el fracaso y el vacío es grande; Y tropiezan, como no, en lo mismo y más que aquellos a los que habían gritado.
     El juego " Líder-inferior".
    La presión grupal se ve aquí muy acentuada. Cuando alguien está presionado y todo su tiempo se lo tienen organizado, busca una forma de escapar. Hay una contradicción muy fuerte entre lo que vive y lo que piensa: vive encerrado y con mucho malestar; pero le han convencido que está luchando por ser libre, y que pese a todo vive mejor que "la gente de la calle".
    Entonces le surge la necesidad de ser uno de los jefes. Siendo así podrá hacer algunas cosas por sí mismo, y esto le libera del agobio que vive. Aspira a ello disimuladamente. Cuando consigue uno de estos puestos de arriba, piensa que es por merecimiento o por inteligencia, o alguna otra razón que se lo corrobore. Cuando pierde un lugar así dentro del grupo le viene la idea de que no obedece ni practica la doctrina del grupo.
    Este hecho que es bien conocido por el líder, hace que juegue con sus adeptos a ponerles, 1º, y quitarles, después, de posiciones importantes dentro del grupo. De está forma se gana la obediencia de los que llevan mas tiempo con el chantaje de: o me obedeces o bajas posiciones. A la vez es un juego muy fuerte con los sentimientos, que hace que los adeptos se mantengan en constante tensión. Pues el mismo grupo presiona al individuo cuando es rebajado de un puesto, y aprovechan para descargarle los malos momentos que les hizo sentir.
    El líder dice que hay que ser lo suficientemente humildes para subir puestos y para dejarlos, sin que eso te afecte. Los líderes hacen cambios, ponen a unos y quitan a otros como responsables, esto lo hacen con casi todos pero ellos no dejan nunca de ser líderes. ¿Por qué? Porque lo importante es alterar el grupo, conseguir mantener a los adeptos en tensión; la palabra “amor”la usan para convencer, no para amar. Y de esta forma consiguen convencer al grupo de que todo lo que ellos hacen es amor a los demás. Enseñan como bueno lo que ellos hacen.
    Hay también en este hecho una contradicción muy grande. Jesús dijo << Entre vosotros, el que quiera ser el primero sea el servidor de todos >>. No dijo el mandón de todos. Esto es lo que hacen los líderes o el líder ser el que manda sobre todos.
    El líder convence a los adeptos de que le persiguen porque no entienden (los adeptos) su doctrina y les convence de que le están martirizando de tantas veces que se la tenía que explicar (la doctrina).
        (1) HIPNOSIS.
    La inducción de un estado de alta predisposición a la sugestión bajo hipnosis es a menudo sutilmente enmascarado bajo los nombres de relajación o meditación.
        (2) PRESIÓN GRUPAL.
    La supresión de la duda y la resistencia a las nuevas ideas se consigue explotando la necesidad de pertenecer a un grupo.
        (3) BOMBARDEO DE AMOR.
    Creación de un sentido de familiaridad y pertenencia a través de abrazos, besos, el contacto físico y los halagos continuos.
        (4) RECHAZO DE VALORES ANTERIORES.
    La constante renuncia de los pasados valores y creencias acelera la aceptación del nuevo estilo de vida.
        (5) DOCTRINA OSCURA.
    Fomenta la aceptación ciega y el rechazo de la lógica a través de lecturas complejas de una doctrina incomprensible.
        (6) ANULACIÓN DE LA PRIVACIDAD.
    Consigue la perdida de la evaluación lógica, a través de la imposibilidad de reflexionar en soledad.
        (7) PRIVACIÓN DEL SENTIDO DEL TIEMPO.
    Evitando la presencia de todo reloj, se destruye la capacidad de evaluar la información, reacciones personales y funciones corporales en relación al paso del tiempo.
        (8) REGRESIÓN.
    Se obtiene a través de la orquestación de conductas infantiles, una obediencia infantil.
        (9) REGLAS DE NO COMPROMISO.
    Se induce la regresión y la desorientación por medio de la implantación de rígidas reglas sobre horas y modos de comer y dormir, de lavarse y de uso de medicamentos.
        (10) ABUSO VERBAL.
    Se anula la sensibilidad a través de ataques con un lenguaje agresivo e insultante.
        (11) PRIVACIÓN DEL SUENO Y FATIGA.
    Crea desorientación y vulnerabilidad, prolongando la actividad por la uniformidad de ropajes en el grupo.
        (12) CÓDIGOS DE VESTIMENTA.
    Se anula la individualidad por la uniformidad de ropajes en el grupo.
        (13) CANCIONES Y CÁNTICOS.
    Se eliminan las ideas ajenas al grupo, a través de la repetición de cantos o frases estereotipadas.
        (14) CONFESIONES.
    Se consigue la destrucción de las individualidades mediante la denuncia ante el grupo, a través de las debilidades, sentimientos y dudas de cada uno.
        (15) COMPROMISO FINANCIERO.
    Obtiene una creciente dependencia al grupo rompiendo lazos con el pasado mediante la donación de dinero.
        (16) SEÑALAMIENTO.
    Crea un falso sentido de rectitud, apuntando los defectos del mundo exterior y de otros cultos.
        (17) JERARQUÍA OSTENTOSA.
    Promueve la aceptación de la autoridad del culto, prometiendo elevación, poder y salvación.
        (18) AISLAMIENTO.
    Induce la perdida de realidad mediante la separación física de los parientes, amigos, sociedad y de toda referencia externa.
        (19) APROBACIÓN CONTROLADA.
    Mantiene la vulnerabilidad y confusión, premiando o castigando alternativamente similares acciones.
        (20) CAMBIO DE DIETA.
    Crea desorientación e incrementa la susceptibilidad al desborde emocional, privando al sistema nervioso de sustancias necesarias para una función normal.
        (21) JUEGOS.
    Inducen dependencia al grupo, a través de reglas complejas y oscuras.
        (22) FALTA DE CUESTIONAMIENTO.
    Se desalienta toda critica, conduciendo a la aceptación automática de creencias.
        (23) CULPA.
    Se refuerza la necesidad de 'salvación', exagerando las faltas del anterior estilo de vida.
        (24) TEMOR.
    La lealtad y obediencia al grupo se mantienen a través de la amenaza moral o física ante el más leve pensamiento, acto o palabra 'negativos'.
        (25) REEMPLAZO DE RELACIONES.
    Se destruyen las familias anteriores al ingreso a la secta, mediante el arreglo de nuevas parejas y 'familias'.
    ATENCIÓN: no todas estas técnicas son utilizadas por estos grupos, unos utilizan estas y otros utilizan otras diferentes a estas.
    A continuación podrán leer unas páginas sobre la iglesia de los mormón en la que verán la estructura, la fundación, la historia, el culto y las actividades y la situación actual. Hoy en día se le considera un grupo sectario. También veremos los enlaces matrimoniales de diferentes grupos sectarios.
    IGLESIA MORMÓN:
    Estructura
    La Iglesia mormona es laica, jerárquica y autoritaria. Los empleados de las oficinas de cada congregación individual (custodias) son miembros laicos que van rotando en los puestos. El obispo, que junto con dos cancilleres preside por lo general una custodia, ocupa este puesto durante cinco años. Cada custodia cuenta con cerca de 200 puestos a repartir, por lo que la participación activa de los miembros es alta. La mayoría de éstos tiene la oportunidad de impartir clases, pronunciar sermones, trabajar en servicios de ayuda social y participar en actividades sociales.
    La organización administrativa de esta confesión tiene forma vertical. Por encima de la custodia se encuentra el distrito administrativo, que engloba varias custodias, presidido por tres miembros y con un consejo superior formado por doce personas. Siguiendo la estructura jerárquica de la organización, aparecen las autoridades generales, dedicadas plenamente a este trabajo. Teniendo en cuenta que todos los participantes que son elegidos para el puesto de responsables generales son laicos, no se puede esperar que sean burócratas profesionales ni cuenten con estudios teológicos. Por lo general, los programas y las políticas de acción de la confesión están determinadas por un organismo central; a pesar de esto, a veces se incentiva a los responsables a nivel local para que den sus opiniones, e incluso para que desarrollen programas experimentales.
    Dentro del conjunto de las autoridades generales del movimiento mormón, hay un grupo de tres hombres que presiden el obispado y el Primer Quórum de los Setenta, con siete presidentes. Sobre ellos existe un grupo que actúa de forma muy eficaz como creador de políticas de acción; recibe el nombre de Consejo de los Doce Apóstoles. En la cima de esta jerarquía está el presidente de la confesión, a quien sus miembros denominan el profeta. El presidente y sus dos consejeros (la primera presidencia), suelen reunirse con el Consejo de apóstoles, aunque también lo hacen por separado. Los mismos apóstoles eligen a los apóstoles nuevos. Según ciertos principios de antigüedad, los apóstoles van ascendiendo en la jerarquía de forma gradual. Cuando muere el presidente, el apóstol de más edad ocupa el cargo.
    La fundación de la iglesia
    Durante la década de 1820, mientras Smith trabajaba como campesino, fue desarrollando sus ideas religiosas, inspiradas en revelaciones divinas. Según sus propios relatos, en 1827, vio un libro formado por láminas doradas, lleno de jeroglíficos; el libro había estado enterrado en un monte cercano, y él lo había hallado gracias a las indicaciones recibidas de un ángel, el ángel Mormón. En 1830 pudo resolver el significado de esos jeroglíficos "gracias al don y poder de Dios", y publicó el Libro del Mormón que, según él, constituía un registro de verdades religiosas de los antiguos habitantes de Estados Unidos. El 6 de abril de 1830 Smith fundó la iglesia de Cristo, nombre que pronto sería cambiado por el que se le conoce en la actualidad, Iglesia Cristiana de los Santos del Último Día.
    En el plazo de un año, a comienzos de 1831, la sede central se trasladó a Kirtland (actual Kirtland Hills), Ohio. Al mismo tiempo, se estableció otro grupo mormón en Missouri, en un principio en los alrededores de la ciudad de Independence, a donde según Smith, volvería Jesús.
    Historia
    La confesión mormona apareció durante los primeros años del siglo XIX, inmersa dentro del movimiento estadounidense de revitalización religiosa que recibió el nombre de Segundo Gran Despertar. De acuerdo con el relato de los adeptos, fue alrededor de 1820, cuando Joseph Smith tenía 14 años y vivía con su familia cerca de Palmira, en Nueva York. Tuvo una visión de Dios Padre y de Jesucristo; ellos le aseguraron la inexistencia en la tierra de la verdadera iglesia.
    Culto y actividades
    El culto mormón es sencillo; está compuesto por himnos, oraciones, el sacramento de la Cena del Señor (celebrado con pan y agua) y sermones pronunciados por miembros de la comunidad laica de la congregación. Entre los mormones hay organizaciones que ofrecen actividades adicionales y proyectos de servicio para niños, adolescentes y mujeres. Hay unos 24 templos mormones en el mundo. En estos templos, aquellos miembros que hayan demostrado una gran fidelidad a la congregación actúan como apoderados o representantes de antepasados ya fallecidos. Los matrimonios entre mormones devotos son consagrados "en el tiempo y para toda la eternidad".
    Además de su pujante sistema de misiones, los mormones son muy conocidos por sus programas de ayuda social. También se les conoce por su Palabra de Sabiduría, un código de salud que les prohibe tomar té, café, alcohol y tabaco. La confesión también sustenta el mundialmente conocido Coro Mormón, y la joven universidad de Brigham, que cuenta con más de 25.000 estudiantes, ambos establecidos en Estados Unidos.
    Situación actual
    En general los mormones son considerados una confesión cristiana conservadora y con frecuencia se les identifica con los protestantes fundamentalistas. Sin embargo, en teología, los protestantes conservadores y los mormones difieren en asuntos fundamentales como la naturaleza de Dios, el concepto de Iglesia y la definición de la salvación. Pero ambos grupos tienen mucho en común respecto a temas sociales. Los mormones son muy poco entusiastas, por no decir enemigos, del ecumenismo. Básicamente, los mormones están en contra del aborto y del control de la natalidad, como también están muy poco abiertos a prácticas "tan poco bíblicas" como es el sacerdocio femenino. Lo mismo que muchos fundamentalistas protestantes, los mormones se consideran a sí mismos una organización de resistencia ante el secularismo y el compromiso liberal. Hoy en día, su actitud conservadora resulta irónica, ya que han dado un audaz vuelco a su originaria concepción en los ámbitos social y económico. En la práctica, los mormones resultan ser mucho más pragmáticos que lo que su reputación nos quiere hacer ver. A pesar de que su índice de natalidad es más alto que el promedio estadounidense, ha descendido de forma notable; además, ahora a los miembros se les permite practicar un cierto control de la natalidad. Si bien están en contra del divorcio, esta práctica no está prohibida, y tienen una media muy similar a la del resto de Estados Unidos.
    Durante muchos años, la Iglesia mormona estuvo en contra de ordenar sacerdotes negros. Este tema tenía una importancia fundamental, ya que a todos los hombres mormones mayores de 12 años y que tuvieran ciertos méritos, se les hacía partícipes de esta ordenación. Esta política fue modificada en 1978, cuando la presidencia general estableció que, desde ese momento, la ordenación se realizaría "sin considerar la raza ni el color". El asunto de la participación de la mujer en los puestos de la confesión es quizás más complicado. A pesar de que las mujeres tienen muchas oportunidades para servir a nivel congregacional y se les incentiva para que puedan desarrollar sus cualidades y logren alcanzar una educación superior, no se les permite la ordenación sacerdotal ni formar parte de la jerarquía eclesiástica.
    Aunque los mormones constituyen una fusión poco usual de cristianismo bíblico, pragmatismo estadounidense, expectativas milenaristas, experimentación económica, política conservadora, fervor evangélico y una fuerte actividad internacional, la confesión cristiana mormona constituye un credo dinámico, de crecimiento acelerado, a pesar de la difícil relación que mantiene con la cultura con la que convive.
    Matrimonio mormón:
    La ceremonia religiosa en la fe de los mormones se le conoce como "sello de ordenanza" porque el hombre y la mujer sellan su compromiso por toda la eternidad, a diferencia del "hasta que la muerte los separe", de la religión católica.

    La ceremonia se debe llevar a cabo entre dos mormones que la congregación consideren que están "listos" para el matrimonio y la boda debe llevarse a cabo en uno de los 44 templos mormones que se encuentran alrededor del mundo.

    La pareja debe vestirse de blanco como símbolo de pureza y se arrodillan frente al altar mientras el oficial o el Sacerdote Supremo sella su unión.

    El matrimonio entre los mormones representa una unión sagrada y por tanto, muchos de los miembros de esta congregación aspiran a tenerla.

    La iglesia también reconoce el matrimonio civil, sin embargo, en dicha ceremonia debe estar presente por algún arzobispo de su iglesia o alguna otra autoridad aprobada por ellos. De hecho, muchas parejas de mormones se casan primero por lo civil y después llevan a cabo su ceremonia en el templo.

    En caso de que un mormón quiera casarse con alguien de diferente religión, sólo podrá casarse por lo civil.
    Totemismo y matrimonio
    Al interior de los grupos totémicos (llamados así debido a que veneraban a un animal, planta u objeto inanimado) se prohibe el matrimonio entre los mismos individuos. Afirmaban que aunque no estaban emparentados por la sangre, sí en cambio estaban unidos en espíritu.
    Sucede algo similar a lo que hoy se observa con el padrino y la ahijada, quienes de acuerdo con la religión católica no deben, ni pueden casarse.
    Matrimonio por consentimiento de esposos:
    Las familias procuran que el enlace nupcial se realice de conformidad con los contrayentes.
    Matrimonio por huida
    Es ella quien da su consentimiento para unirse a él y escapar de casa. Generalmente esta situación se presenta con las parejas precoces, y otras veces cuando el varón no puede pagar la dote.
    Matrimonio a cambio de trabajo
    Dentro del matrimonio, el varón no tiene ningún derecho de propiedad sobre la mujer ni de los hijos. En la mansión de sus suegros recibe el trato de un criado hasta que con su
    trabajo haya indemnizado a la familia el precio del uso de las hembras, ya que cabe aclarar, puede (él) desposarse con las hembras menores de su mujer.